NGC 2392 es una de las más interesantes y hermosas nebulosas planetarias, fácil de encontrar y observar con modestos telescopios incluso desde cielos con contaminación lumínica.
Situada en la constelación de Géminis podemos encontrarla centrando primero Polux (Beta Gémini), de ahí nos dirigimos a Wasat (Delta Gémini), avanzamos un poco más al este y nos encontramos con la 63 Gémini de la 5ª magnitud, a apenas 0,5º al SE encontraremos una estrella doble con componentes de la 8ª magnitud. Un plano para localizar la NGC 2392.
¡Visualicemos esa estrella doble!, enseguida nos daremos cuenta de que la meridional se ve borrosa. No es una estrella, es una nebulosa planetaria, una de las mejores que podemos observar con modestos telescopios, ¡la muerte de una estrella ante nuestros ojos!. La NGC 2392 es asequible a modestos telescopios incluso desde el centro de una gran ciudad, aunque es mucho mejor verla desde un cielo con moderada contaminación lumínica, por ejemplo el del Montseny. Desde allí, con telescopios de 10 a 15 cm de abertura, podremos disfrutar de una de las más hermosas nebulosas planetarias a finales de otoño y principios de invierno en el hemisferio norte, además tiene la virtud de ser una de las pocas nebulosas planetarias en la que podemos ver su estrella central con telescopios amateurs. Si la observamos en visión directa la nebulosa parece que se esfuma, pero si observamos con visión de lado la nebulosa cobra protagonismo, si hacemos ese ejercicio varias veces la nebulosa parece parpadear.
Fotografie esta nebulosa desde el balcón de mi apartamento hace unos meses, con mi Vixen NA 120 montado en la SW NEQ-6 Pro, con una Barlow 2X, mi CCD Orión y un filtro CLS-CCD. Fueron unas 40 fotos para apilar. Una foto individual sin procesar ni calibrar de NGC 2392, se corresponde bastante bien a lo que podemos observar con telescopios de buena abertura (de 8 a 12" de diámetro) y con el llamado "aumento resolvente", los mismos aumentos que el diámetro de nuestro instrumento en mm.
Fotografie esta nebulosa desde el balcón de mi apartamento hace unos meses, con mi Vixen NA 120 montado en la SW NEQ-6 Pro, con una Barlow 2X, mi CCD Orión y un filtro CLS-CCD. Fueron unas 40 fotos para apilar. Una foto individual sin procesar ni calibrar de NGC 2392, se corresponde bastante bien a lo que podemos observar con telescopios de buena abertura (de 8 a 12" de diámetro) y con el llamado "aumento resolvente", los mismos aumentos que el diámetro de nuestro instrumento en mm.
La fotografía de los objetos de cielo profundo es complicada, en primer lugar una buena óptica y una montura ecuatorial robusta. Luego hacer un buen seguimiento de la estrella guía que tendremos centrada en el telescopio de guiado paralelo al telescopio con el que hacemos la foto. Por fortuna tenemos en la actualidad cámaras y programas informáticos que hacen de forma automática ese guiado aunque hay que configurarlo todo a la perfección. Una foto de mi equipo mientras configuraba el guiado.
Y tras unos minutos de espera, mientras el PHD Guiding (el programa de guiado que uso) hacía su trabajo, la CCD empezó a trabajar. Una foto de mi equipo trabajando y captando las primeras tomas de NGC 2392.
Y tras unos minutos de espera, mientras el PHD Guiding (el programa de guiado que uso) hacía su trabajo, la CCD empezó a trabajar. Una foto de mi equipo trabajando y captando las primeras tomas de NGC 2392.
Y tras mucho trabajo aquí está el resultado, utilizando varios programas informáticos y mi pericia al 100%, una de las más hermosas nebulosas planetarias: NGC 2392. La llaman "nebulosa cara de payaso" y también "nebulosa del esquimal".
Es un nombre muy apropiado, su imágen nos recuerda a una cara humana si la observamos y fotografiamos con equipos amateurs. Con equipos profesionales la cosa cambia, pero nos sigue maravillando la belleza y el misterio de esta extraordinaria nebulosa situada a varios miles de años-luz de nuestra morada, el "pequeño punto azul" que decía Carl Sagan. Una imagen de esta magnífica nebulosa planetaria realizada por el HST.